viernes, 26 de agosto de 2011

Vergüenza de ser madridista.

Ha pasado ya una semanita desde el partido de vuelta de la Supercopa de España, una Supercopa que podría ser recordada como una de las más interesantes de su (todo sea dicho) corta historia, por enfrentar a, posiblemente, los dos mejores equipos de fútbol del momento. Algo que quedó demostrado tanto en el partido de ida como en el de vuelta, donde cualquiera de los dos equipos mereció ganar. Por desgracia, muchos no la recordaremos solo por eso, sino por el espectáculo que dio el entrenador del Real Madrid, José Mourinho y el propio equipo al final del partido.

Lo de Mourinho no tiene nombre, desde siempre ha sido un personaje que me ha caído mal, y aunque lo haya fichado "mi" equipo, el sentimiento no cambia. Me avergüenza el 90% de las veces que abre la boca y encima sus acciones en el campo son lamentables, y prueba de ello fue el gesto que hizo el otro día en el Camp Nou, el ya famoso dedazo. Y para colmo, sus disculpas "solo ante el madridismo" han sido patéticas. Lo que tiene de buen entrenador, lo tiene de payaso.

Por otra parte, a falta de unos pocos minutos para finalizar el partido Marcelo hizo una entrada criminal a Cesc, lo que provocó la típica tangana a las que los últimos Madrid - Barça nos tienen tan acostumbrados (por desgracia), lo que calentó aún más el ambiente, pero lo más indignante, fue que en la entrega del trofeo al vencedor, el equipo "señor" ni siquiera se esperó a que el Barça alzara la Supercopa de España, algo que no estaba obligado a hacer, pero que un buen y humilde rival hubiera hecho.

Todos estos feos gestos, provocan que algunos nos avergoncemos de "nuestro" equipo, esa no es la imagen que queremos para el Real Madrid.
votar